Autor: agradecimientos, Lectura: 5 minuto(s), Actualización:
Muchos de nosotros tenemos la tentación de desviar las palabras amables, pero eso puede estar haciendo más mal que bien.
odo el mundo anhela elogios, pero aceptar un cumplido con gracia es un desafío casi universal. Si es como la mayoría de los empresarios, está ansioso por recibir un cumplido, especialmente de alguien a quien admira, pero no está seguro de qué decir en respuesta.
Mucha gente minimiza los cumplidos para evitar la apariencia de presunción. Es tan común que los sociolingüistas han categorizado las tres respuestas a un cumplido: aceptación, desvío o rechazo. En lugar de aceptar humildemente o rechazar rotundamente las palabras amables, las personas a menudo eligen desviar o diluir el cumplido.
Puede sentirse tentado a responder con negación o autoinsulto. Es fácil decir algo como: «Gracias, pero realmente no fui tan útil» o «Gracias, pero he tenido este atuendo durante 10 años; ¡prácticamente se está cayendo a pedazos!». Otros piden tranquilidad adicional: «¿En serio? Sentí que me equivoqué por completo en el discurso».
Si bien puedes sentir que estás respondiendo adecuadamente, solo socava el cumplido o insulta a quien lo hace. Cuando devalúas un cumplido, puedes enviar el mensaje de que tienes baja autoestima, que no confías en tu trabajo o que no respetas la opinión de la persona que te hizo el elogio.
Si responde negativamente a un cumplido con frecuencia, reconstrúyase para mostrar gratitud. Aquí hay siete formas de aceptar un cumplido con humildad y gracia.
1. Exprese su gratitud. Cada vez que reciba un cumplido, responda con un «Gracias». Es una frase simple, pero poderosa. La persona que hace el cumplido será más receptiva a una respuesta humilde. Di algo como «Gracias, es muy amable de tu parte» o «Gracias, aprecio el cumplido».
2. Comparte el crédito. Si el cumplido se refiere a un esfuerzo de equipo, reconozca las contribuciones de sus colegas. Algunos ejecutivos poderosos llegan a un punto en el que ya no reconocen ni dan crédito públicamente a quienes los ayudaron a tener éxito. Esta es la forma más rápida de perder amigos. En su lugar, comparta sus sentimientos positivos. Responde con algo como «Todos nos esforzamos mucho; gracias por reconocer nuestro arduo trabajo».
3. Recibe premios con la mano izquierda. Si recibe un reconocimiento por un logro profesional en una ceremonia, acepte siempre la placa, el trofeo o el certificado con la mano izquierda. Esto dejará su mano derecha libre para estrechar la mano de la persona que entregó el premio y de aquellos que deseen felicitarlo.
4. Use un lenguaje corporal apropiado. Si se siente incómodo o nervioso, sus señales no verbales pueden dar una impresión equivocada. No te cruces de brazos ni parezcas desinteresado. En su lugar, mantén el contacto visual, inclínate ligeramente hacia adelante e interactúa con los que te rodean con expresiones faciales cálidas. Disfruta tu momento de alabanza.
5. Nunca socaves el cumplido. Reciba cada cumplido con gratitud sin pretensiones. Evite frases como «Oh, no es gran cosa» o «Gracias, pero no fue nada». Cuando minimizas un cumplido, puedes sentir que estás mostrando humildad. En cambio, puede hacer que la persona que te hizo el cumplido se sienta personalmente rechazada.
6. Evite una batalla de cumplidos. Especialmente cuando un cumplido proviene de alguien a quien respetas y admiras, puedes sentir la inclinación a «superar el cumplido» o restar importancia a tu trabajo. Esto puede ser apropiado en Asia, pero no en los EE. UU. Luche contra el impulso de superar los elogios sinceros de alguien. No digas algo como «Gracias, pero sabemos que mi opinión no fue tan valiosa como la tuya». En lugar de eso, aprovecha el momento y agradece el elogio.
7. Siga la etiqueta apropiada. Si eres objeto de un brindis, sigue el protocolo adecuado. Los destinatarios de los brindis no beben al final del discurso; piense en lo incómodo que sería cantar «Feliz cumpleaños» en su propia fiesta. En cambio, asiente con la cabeza y sonríe, dales a todos la oportunidad de tomar un sorbo de su bebida y luego ofrece un brindis de regreso.